Rugby World Cup 23 , 2023

Chile cayó contra un gran equipo

Fue caída 71 a 0 para unos Cóndores que fueron claramente superados por un equipo que está mostrando ser cada vez más candidato al título. A pesar de las diferencias, Chile trabajó a destajo

Fue lo que sabíamos que sería. Un equipo de Inglaterra con claras intenciones de ser campeón mundial frente a un equipo chileno hambriento por aprovechar, con sus herramientas, la ocasión.

Veinte minutos le llevó a Inglaterra poder cruzar la línea de try por primera vez. La defensa chilena, estoica, defendió durante todo el partido, pero mientras los brazos, las piernas y cuerpo aguantó, Chile le dio pelea en cada situación, en cada formación, en cada punto de encuentro.

Esos primeros 20 minutos tuvieron a Chile protagonista, aprovechando cada balón que tuvo para buscar su momento en un partido que, claramente, tenían ganador asegurado antes del comienzo.

“Fue una dura lección,” dijo Martín Sigren. 

“Hace cuatro años teníamos este tipo de resultados contra Canadá, perdíamos contra Brasil. Me tengo que agarrar de esto, no puedo dejar que mis brazos caigan.” 

“Tenemos que seguir trabajando como equipo. Dentro de cuatro años, nuestros resultados serán distintos.”

La diferencia entre ambos equipos era clara antes, lo fue durante, y lo será después. Pero Chile aprenderá mucho de un partido como el de hoy y todo lo que ha vivido en esta Rugby World Cup.

Chile ya probó el maravilloso elixir de jugar contra los mejores del mundo en el mayor escenario global y hará lo imposible para seguir prendido en esta fiesta cuando vuelva al calendario en Australia en 2027.

Lille será otro mojón en el camino de crecimiento del rugby de Chile.

Técnica y tácticamente, las diferencias fueron notorias. Lo innegociable estuvo presente: ese amor por la camiseta y el apoyo incondicional de miles de chilenos que, llegados de Chile y del resto del mundo, alentaron sin parar.

Consultado sobre el apoyo del público, Sigren agregó: “Es una de las cosas que vinimos a buscar, agrandar nuestra base de fans, que haya más seguidores, que la gente nos acompañe. Estamos en un buen camino, todavía hay mucho por trabajar, pero estoy feliz de ver a mi familia y tantas camisetas rojas.

Inglaterra apoyó cinco tries en los segundos 20 minutos para irse al descanso 31-0.

El segundo tiempo tuvo una temprana tarjeta amarilla para Matías Dittus, ventaja demasiado grande para un equipo de la magnitud de Inglaterra, que la aprovechó apoyando dos tries en ese período.

Con la limitada posesión de la que dispuso Sigren y su equipo, siempre buscaron ser positivos y atacaron a los ingleses que tuvieron una gran organización defensiva que cerró todos los caminos al try chileno.

No ayudaron las fallas en los lineouts en ataque que podrían haber sido una preocupación para los ingleses.

El wing Henry Arundell apoyó cinco de los once tries ingleses para una enorme lección que los ayudará en lo que, todos esperamos, sea un futuro mejor.

“No estoy decepcionado, es la realidad,” dijo Pablo Lemoine, el entrenador chileno. 

“Es lo que está pasando en el rugby hoy día. Nunca jugamos un partido como éste antes de venir a Rugby World Cup. Ahora estamos aquí y somos parte del show, pero nunca podemos jugar este tipo de partidos porque no recibimos el real apoyo para hacerlo en un ciclo mundialista.”

“Espero que esto cambie porque no es bueno para los jugadores, para los simpatizantes.”

"Cada partido nos dio cosas positivas. En este momento solo pienso en lo negativo de hoy; el resultado es totalmente injusto."

Los elogios al equipo chileno no tardaron en llegar:“Tenemos que darle un enorme reconocimiento a lo que hizo Chile hoy; jugaron de manera corajuda, comprometida y nos la hicieron realmente difícil,” dijo el entrenador inglés Steve Borthwick.

La participación chilena finalizará el próximo sábado 30 de septiembre en el Stade de la Beaujoire de Nantes, en el primer enfrentamiento entre dos equipos sudamericanos en la historia de Rugby World Cup contra Los Pumas.

Después de un fin de semana libre, Inglaterra jugará su cuarto partido de la fase de grupos el sábado 7 de octubre ante Samoa en el Stade Pierre-Mauroy de Lille.